Durante mi estadía en el Sistema Carcelario de Puerto Rico
pude vivir y conocer de primera mano las llamadas herramientas educativas y de
rehabilitación con las cuales constaba la mal llamada Agencia. Mi blog, no es
un vehículo con el cual deseo manchar, ni mucho menos pisotear o criticar el
Sistema Correccional, más bien, mi único interés es servir de voz para aquellos
que no la tienen y a su vez, ser un vehículo que informe a la sociedad libre
sobre como realmente se vive en las cárceles de Puerto Rico. Cualquiera que viere
mis antecedentes penales, seguro me juzgaría y me sentenciarían nuevamente.
Porque así vivimos en Puerto Rico, señalando el pasado y juzgando a todos por
igual. El tan llamado, (Ojo por Ojo), es por eso que estamos ciegos.
Solo quisiera que este blog un día no lejano, fuese
escuchado, o leído, no solo por muchos Puertorriqueños sino, que también por el
gobierno y por personas de diversas nacionalidades. Muchas veces los confinados
y los exconfinados conocen y saben cómo realmente se conduce a una sana
rehabilitación. Los que viven 24 horas allí, cerrados entre acero y concreto
conocen su situación y saben cuáles herramientas podrían funcionar para
alcanzar una verdadera rehabilitación. Pero el Sistema se niega a escuchar sus
propuestas. ¿Quién mejor que un confinado para saber cómo puede cambiar?, ¿Cómo
podría llegar a ser una mejor persona?, ¿Qué necesita para lograrlo?
Aquí les mencionaré algunas de las herramientas usadas o
establecidas en la actualidad en las cárceles de Puerto Rico.
1).
Los confinados bonifican (7) días al mes por labores realizadas dentro y fuera
de las Instituciones Penales. Tales como; pintar las facilidades, hacer las
áreas verdes, trabajo de ornato (Pasar trimer en las áreas verdes de las carreteras
y agencias del gobierno, bajo contrato con los municipios) y barrer y mapear
las facilidades de la cárcel.
2).
Los confinados bonifican (3) días al mes si ESTUDIAN.
Usted que lee este blog, le pregunto. Siendo yo un confinado,
que no sabe hablar correctamente. Porque deserte posiblemente de escuela
elemental y sé que me faltan varios años para salir de la cárcel. ¿Cuál usted cree que sería mi opción?
Pues lamento decir que la gran mayoría de los confinados
optan por ir a coger el trimer, porque todos sueñan con salir de la cárcel
pronto.
¿Qué
pasaría si invirtiéramos esas bonificaciones?
Yo les podría dar esa respuesta. Tendríamos confinados
educados, que se expresen correctamente, con alternativas reales cuando
salieran a la libre comunidad. Tendríamos muchos ex confinados haciendo
bachilleratos, maestrías y quien sabe, doctorados. Y en cambio la Agencia se
vería obligada a contratar Civiles para hacer los trabajos o tendrían Oficiales
Penales pintando las estructuras. Es
solo por esa razón que el Secretario o director de Educación de Corrección
lleva (30) años sentado en su plaza y nada ocurre.
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